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Je suis à prendre (1978)

7.4 | abr. 05, 1978 (FR) | Romance, Drama | 01:36
Presupuesto: n/d | Ingresos: n/d

Equipo destacado

Writer, Director
Camera Operator
Production Manager
Director of Photography

Reparto

profile
Karine Gambier
Maguy, la femme de chambre
profile
Patrick Bruno
Bertrand, le mari d'Hélène
profile
Robert Le Ray
Ralf, le majordome
profile
Jean-Pierre Armand
Hector, le palefrenier
profile
Lydie Beggy
orgy scene
profile
Sophie Bulle
uncredited, orgy scene
profile
Samantha
in orgy scene

Fotos

Reseñas

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Nochvemo
7 | mar. 21, 2025
La actriz de cine para adultos más popular de Francia de todos los tiempos, Brigitte Lahaie, que nunca deslumbró ni actuó mejor, protagoniza el papel de Hélène, la ruborizada esposa reciente del melancólico señor de la mansión, el Sr. Bertrand, un hombre atractivo que, sin embargo, una vez instalados en su lujoso castillo, prácticamente la ignora soslayando su anhelo, perfectamente lógico, de la consumación carnal. No obstante, él es un libertino consumado, como lo demuestran sus frecuentes visitas al burdel del pueblo, y quiere asegurarse de que su inexperta esposa se adapta perfectamente a sus necesidades sexuales, así que, compañada de vasos de leche con alguna sustancia afrodisíaca, Hélène se somete a una serie de ardientes iniciaciones íntimas instigadas por la criada Maguy (la siempre inquietante Karine Gambier), el mozo de cuadra Hector (Jean-Pierre Armand) y el anciano mayordomo Ralf (Robert Leray). “Je Suis à Prendre” se distingue notablemente del porno habitual por la dolorosa acumulación erótica del director en cada crescendo carnal. Leroi se toma su tiempo para seducir al espectador, algo que se agradece particularmente, con una inocente Lahaie convirtiéndose en un objeto de deseo por encargo. La localización que alimenta la imaginación es utilizada de manera ejemplar por la fenomenal cinematografía de pantalla ancha de François About, e incluso la música inquietante y suavemente tintineante realmente se suma a la abrumadora atmósfera de pavor, mezclado con un deleite creciente. Esta película se considera el logro más destacado de Francis Leroi, y se ha convertido en una de las mejores películas europeas para adultos de todos los tiempos.