Adriana es una mujer valiente y leal a su familia cuya vida sufre un inesperado revés cuando se ve obligada a hacer algo terrible por salvar la vida de su hermano Pedrito. Esa misma noche, y sin haber procesado todavía lo ocurrido, Adriana debe asistir a un baile en la Corte donde conoce a Rafael, un soldado recién llegado de la guerra. Lo suyo es amor a primera vista. Sin embargo, cuando regresa a casa, Adriana recibe un duro golpe: su padre ha fallecido y, antes de morir, firmó un acuerdo para desposarla con un desconocido. Devastada por la pérdida y su forzado compromiso, Adriana y sus hermanos, junto a su aya, Isabel, se trasladan a Valle Salvaje, hogar de la familia de su prometido y de doña Victoria, tía de Adriana. Lo que la joven desconoce es que la sombra de la tragedia en la que se vio envuelta la persigue hasta el remoto valle. O, lo que es peor, que su tía Victoria lidera una oscura conspiración que amenaza la vida de los suyos.

Rafael, recién regresado a Valle Salvaje, felicita a su hermano Julio por su compromiso y se enfrenta a Gaspar por el estado de la ganadería. Adriana sufre un impacto al reencontrarse con Rafael y saber que se trata del hermano de Julio. Isabel se lleva a Pedrito, dispuesta a cumplir el despiadado plan de Victoria. Alejo sorprende a Bárbara con sus inquietudes artísticas y despierta el interés de la joven. Gaspar paga su frustración con Matilde, recibiendo luego una reprimenda de su madre. Alejo comparte su obra con su tía Mercedes y la emoción del momento les empujará a fundirse en un apasionado beso. Adriana y Rafael deciden reprimir su deseo. Julio intenta acercarse a Adriana, pero evita ponerla en un compromiso. Mercedes oculta su vergüenza por lo ocurrido con Alejo cuando Pilara le pide que, el día que falte, tome las riendas de la familia. Preocupación de Adriana y Bárbara por la tardanza de Pedrito e Isabel cuando esta aparece dando la voz de alarma: ¡Pedrito ha desaparecido!

La noticia de la desaparición de Pedrito activa la búsqueda por parte de los hombres. Adriana quiere participar, pero se lo niegan. A pesar de las protestas de Bárbara y Adriana, la búsqueda se iniciará por la mañana, con las primeras luces. Bárbara culpa a su hermana de todo lo que les está pasando. Incluso, piensa en huir de allí con Pedrito en cuanto aparezca. Pero Isabel parece calmarla y hacerle ver que su hermana no es tan mala como ella siente. Victoria y José Luis creen que han conseguido su objetivo de eliminar al niño. Aun así, fingen preocupación por Pedrito y colaboran en las labores de búsqueda. Isabel, por su parte, se siente culpable. José Luis llama la atención a Victoria por la incompetencia de Gaspar en el trabajo, ella reprende a su hijo y le ordena volver a ganarse la confianza de los Gálvez de Aguirre. Rafael ayuda a Adriana a buscar a su hermano. Tras una larga búsqueda, lo encuentran en brazos de un desconocido, aparentemente sin vida.

Pedrito se debate entre la vida y la muerte, mientras Victoria obliga a Isabel a terminar el trabajo. Victoria se enfrenta a Gaspar, exigiéndole que respete a su mujer y cumpla su obligación de darle un nieto. Alejo ayuda a Bárbara a encontrar una forma de cuidar y distraer a Pedrito. Bárbara culpa a Adriana por el estado del pequeño, pero el amor y preocupación por el niño une a las hermanas. José Luis fuerza una reunión familiar para anunciar la fecha del enlace de Julio y Adriana, pero esta no piensa casarse hasta que Pedrito se recupere.

In extremis, Rafael descubre la taza envenenada y consiguen salvar la vida de Pedrito. Victoria compra a Juana, la criada, para que cargue con la culpa y la despide. Pilara trata de convencer a su esposo para retrasar la boda y Bernardo sufre la indiferencia de Mercedes. Rafael rechaza un nuevo acercamiento con Adriana y Julio acepta las disculpas de su prometida por retrasar la boda y se muestra comprensivo. Pilara teme que Victoria esté manipulando a su marido y se encara con ella. Victoria exige a Isabel que cumpla su misión y anima a Matilde a reconquistar a su marido, pero Gaspar vuelve a humillarla. Alejo tiene un detalle que conquista aún más a Bárbara. Por su parte Pedrito, ya fuera de peligro, siente una inmediata fascinación por Luisa. Los Gálvez de Aguirre brindan con Adriana por la recuperación de Pedrito cuando José Luis regresa interrumpiendo la celebración con una noticia: ya lo ha pactado con el sacerdote y la boda se celebrará antes de lo que nadie esperaba.

Rafael no está de acuerdo con la manera que tiene Gaspar de llevar la finca, se lo hace saber a Julio y le pide que empiecen el barbecho. Las discrepancias por la finca provocan que los hermanos lleguen a las manos. Victoria continúa presionando a Isabel para que acabe con un muy recuperado Pedrito. Isabel debe intentar volver a ganarse al niño, que está encantado con Luisa. Matilde, que se siente lejos de su marido, intenta que Julio le muestre apoyo y consideración en el trabajo, buscando un acercamiento con Gaspar. Bárbara cree estar conectando con Alejo en un sentido romántico, cuando la realidad es que este la usa para dar celos a Mercedes. Rafael se sincera con Adriana: la verdadera razón que ha desatado su ira contra su hermano ha sido por ella, no soporta la idea de perderla una vez suceda la boda. Pilara descubre algo de José Luis que la deja en estado de shock.

José Luis abronca a sus hijos por la pelea. Julio parece aceptarlo, pero Rafael se rebela por la diferencia de trato, una vez más. Adriana y Luisa tienen una relación cada vez más cercana y, de manera velada, Luisa advierte sobre el hecho de casarse con un desconocido. Julio nombra a Gaspar máximo responsable de la finca, ascendiéndole por encima de Rafael, que se marcha de casa en señal de protesta. Gaspar rechaza a Irene por primera vez y se disculpa con Matilde, a quien agradece que sea la responsable de su ascenso. Alejo y Mercedes por fin dan el paso que ambos estaban esperando y certifican su relación. Adriana trata de mediar entre Isabel y Luisa. Isabel finge arrepentimiento y tiende la mano a Luisa, que cree que han limado asperezas. Pilara interroga a Isabel y le mete el miedo en el cuerpo; Victoria se encargará de solucionarlo.

Rafael no ha vuelto a pisar la casa y Pilara trata de interceder por él con José Luis, además de volver a mostrar su disconformidad ante la boda. Adriana, alarmada, decide ir a buscar a Rafael. Gaspar agradece el ascenso a los Gálvez de Aguirre. Mercedes y Alejo planean fugarse, mientras Pilara sorprende a Bárbara, conocedora de lo que siente por Alejo. Victoria anima a Isabel a ganar terreno frente a Luisa y mueve a su hijo a romper con Irene para no poner en peligro su posición de capataz. Alejo rehúye de un nuevo acercamiento de Bárbara. Adriana se encuentra con Rafael y, tras una acalorada discusión, se dejan llevar por la pasión. Julio confirma a Pilara que la familia está en la ruina e Isabel fuerza un accidente que pone en peligro el embarazo de Luisa.

Adriana manda llamar a Atanasio, que recomienda reposo a Luisa, pero Victoria, de espaldas a sus sobrinas, se ocupa de obligar a Luisa a trabajar. Irene interrumpe una discusión entre Rafael y Julio y descubre el motivo. Alejo y Mercedes siguen adelante con sus planes de fuga. Bárbara, ajena, se lanza a besar a Alejo, al que acaba confesando su amor, pero él le rompe le corazón. Pilara sorprende a Adriana, tratándola con cariño, por primera vez y, tras enfrentarse al recuerdo de Antonio, Adriana le acaba confesando a Pilara la verdad sobre su muerte . Irene informa a Pilara de la humillación que ha sufrido Rafael, al que han arrebatado el puesto de capataz y Pilara se encara con José Luis, al que hace recapacitar. Por orden de su padre, Julio vuelve a degradar a Gaspar y le devuelve el puesto a Rafael. En un momento de ternura con Pedrito, Luisa vuelve a sentir a su bebé y Adriana sorprende a Rafael con una decisión firme: no va a seguir adelante con esa boda.

Movido por Pilara, Rafael hace las paces con Julio y vela por la unión de los hermanos. Victoria culpa a Pilara de la humillación sufrida por Gaspar, quien paga su rabia con Matilde. Victoria intima con José Luis y Pilara es testigo accidental. Celosa y rabiosa, Pilara se enfrenta a Victoria. Bárbara y Adriana se imponen para que Luisa pueda guardar reposo, pero Victoria no lo permite. Alejo y Mercedes siguen adelante con sus planes de fuga. Mercedes escribe una carta de despedida a su hermana y vuelve a humillar a Bernardo. Pilara se dispone a contarle a Adriana lo que ha averiguado sobre su tía, pero José Luis las interrumpe. Las Salcedo de la Cruz celebran con los Gálvez de Aguirre la última cena antes de la boda y Rafael frena, disimuladamente, a Adriana antes de que se atreva a dar el paso que prometió. Irene se sincera con Gaspar y este vuelve a caer en sus redes, dejándose llevar por la pasión. Victoria manipula a Pilara sin sospechar el fatídico plan de Victoria contra ella.

Adriana, muy nerviosa y llena de dudas, está lista para ir a casarse, pero la ceremonia se suspende cuando Rafael encuentra a su madre muerta. Los Gálvez de Aguirre están destrozados, sobre todo José Luis y Rafael. José Luis encuentra unas cartas que Pilara dejó para sus hijos y otra dirigida en conjunto a Mercedes y a él. Rafael no es capaz de leer su carta, es Adriana quien le ayuda a hacerlo y logra que el muchacho pueda despedirse de su madre de manera casi onírica. Por su parte, Mercedes y Alejo deben cancelar su plan de huida. Además, Mercedes no consigue recuperar la carta de despedida que dejó a su hermana. Matilde da ánimos a Gaspar, sin Pilara intercediendo por su hijo en la finca, su situación debe mejorar.

Se celebra el funeral de Pilara. José Luis le cuenta a Victoria el último deseo de Pilara: su mujer quería que se casara con Mercedes. Victoria cree que se trata de una locura, pero comprueba que José Luis lo está considerando. Mercedes y José Luis no descartan su matrimonio, pero deciden darse un tiempo y pensarlo. Rafael e Irene siguen llorando a su madre. Alejo intenta volver a acercarse a Mercedes, pero su tía parece decidida evitarlo. Victoria paga su frustración con Pedrito, lo que supone un choque con Adriana. Isabel sigue atosigando a Luisa que, esta vez, le para los pies. Bernardo sospecha que la muerte de Pilara no fue a causa de la enfermedad y se lo cuenta a Rafael. Ambos encuentran un hilo del que tirar. Hilo que, aunque aún no lo saben, conduce a Adriana.

espechado, Alejo destroza la novela que escribió para su tía. Bárbara le consuela como puede, sin saber el verdadero motivo de su desdicha. Mercedes, además, tiene un enfrentamiento con Victoria y descubre que José Luis le ha contado la última petición de Pilara. Isabel, por orden de Victoria, sigue cargando de trabajo a Luisa, pese a que Matilde le recomienda no hacerlo. Luisa comienza a sospechar de Atanasio. Rafael acude a Adriana buscando consuelo. Gaspar quiere dar un paso adelante con los Gálvez de Aguirre y ayudarles mientras superan la pérdida de Pilara. Bernardo y Rafael continúan con su investigación, aunque Rafael ya no está tan convencido. Victoria descubre que José Luis jamás se planteó estar con ella tras la muerte de Pilara.

Mercedes se enfrenta a Victoria: le pide que guarde silencio sobre a su boda con José Luis. Adriana quiere que Luisa priorice su descanso, lo que la lleva a tener un desencuentro con Isabel, quien pide explicaciones a Luisa. Bárbara cree que está más cerca de Alejo y se le declara, para gran incomodidad del joven. Julio lee la carta que Pilara escribió a Rafael, que sigue hundido y sin superar la defunción. Adriana le ayuda a afrontar su vacío instándole a hablar con la tumba de la difunta. Rafael se desahoga y le cuenta a Pilara que está enamorado de Adriana. Gaspar se rebela ante Julio y consuela a Irene, a quien expresa dudas sobre el futuro de su relación. Isabel tira a Luisa por las escaleras y Victoria amenaza a José Luis: no quiere que se case con Mercedes; si lo hace, actuará en consecuencia. Bernardo descubre que el botón que encontró en la habitación de Pilara es de Adriana.

Rafael se disculpa con Gaspar por el trato tan injusto al que le ha sometido. Bernardo siembra la duda sobre la culpabilidad de Adriana en los Gálvez de Aguirre. Victoria se venga de José Luis apoyando la decisión de los prometidos de retrasar la boda. Alejo sufre por el rechazo de Mercedes, quien le pide que se aleje de Bárbara para no romperle el corazón. Luisa confronta con Isabel sus sospechas sobre sus supuestos "accidentes", Matilde es testigo e Isabel disipa sus dudas y la conmina a centrarse en su matrimonio. Shock de Alejo al descubrir el motivo por el que Irene castiga a Mercedes. Adriana acusa la actitud distante de Rafael y se preocupa por Alejo, quien se refugia en el alcohol y enfrenta a Rafael a dolorosas verdades. Matilde consigue seducir a Gaspar que termina por volver a humillarla. Rafael se enfrenta a su padre y prohíbe a Bernardo recurrir a la Santa Hermandad para investigar a Adriana sobre la muerte de Pilara.

Alejo amenaza a Mercedes con hacer público su idilio para evitar que se case con su padre. Atanasio despierta las sospechas de Luisa y esta las comparte con Adriana. Rafael echa en cara a Julio que leyera la carta de Pilara, pero los hermanos se terminan reconciliando. Alejo rechaza a Bárbara, que, humillada, avisa a Adriana de su intención de abandonar Valle Salvaje. Adriana confronta a Rafael, que acaba confesando el motivo de su cambio de actitud. Movido por las amenazas de Victoria, José Luis le pide a Mercedes retrasar el anuncio de su matrimonio, pero ella desoye la petición. Se celebra la misa réquiem a la que Irene, dolida con la familia, decide no ir y se refugia en brazos de Gaspar al que le confiesa su embarazo. Bernardo aparece al final de la ceremonia con la Santa Hermandad que detiene públicamente a Adriana.

Los Gálvez de Aguirre no consiguen evitar la detención de Adriana, ni convencer a Bernardo para que retire la denuncia. Bernardo delata a Rafael como cómplice en la investigación, lo que provoca la ira de Julio contra su hermano. Gaspar muestra su apoyo a Irene que, alterada por el embarazo, se obsesiona con impedir la boda entre su padre y Mercedes buscando, sin éxito, la complicidad de Julio. Angustia en la Casa Pequeña por Adriana. Luisa muestra su apoyo a Bárbara, e Isabel reprende a Luisa por intervenir en defensa de Adriana, como si fuera una más de la familia. Rafael visita a las Salcedo de la Cruz y Pedrito presencia como Bárbara, furiosa, lo echa de la casa. Victoria amenaza a José Luis que se ve obligado a detener los planes de boda con Mercedes. Esta frena de forma definitiva los acercamientos con Alejo, quien se presenta en su alcoba, borracho. Julio va a buscar ayuda para Adriana y José Luis amenaza a Rafael con la suerte que correrá si le ocurre algo a la Salcedo.

Rafael escucha cómo Julio confirma a su padre que ha visitado a Adriana y ha averiguado que no se ha abierto la investigación. Bárbara suplica a Victoria que recurra al duque para ayudar a Adriana y José Luis aprovecha para chantajear a Victoria, quien tendrá que garantizar la boda de Julio y Adriana. Luisa evita que Victoria pague su ira con Pedrito y se enfrenta a Isabel. Irene y Alejo buscan la complicidad de Rafael para oponerse a la boda, pero la prioridad del joven es Adriana. Rafael cambia de estrategia con Bernardo, que se niega a retirar la denuncia. Mercedes trata de hacer recapacitar a Alejo y sólo consigue provocarlo más. El joven tiene un bonito encuentro con Luisa antes de que Atanasio vuelva a visitar a la criada, que lo pone a prueba. Irene se plantea abortar y Gaspar se opone, mientras Matilde los espía. Tras recurrir a sus influencias, José Luis confirma que no pueden ayudar a Adriana, pero Mercedes interviene, utilizando su poder sobre Bernardo.

Todos en la casa pequeña celebran la vuelta de Adriana, aunque Pedrito se muestra triste y esquivo. Adriana trata de animarlo, pero está muy preocupada por él. Luisa le cuenta el incidente con Victoria, lo que lleva a Adriana a enfrentarse de nuevo a Isabel. Mercedes lee a sus sobrinos la carta en la que Pilara le pedía que se casara con José Luis. Julio y Rafael parecen aceptar la boda, pero Irene y Alejo se niegan a ello. Irene busca a Gaspar en la Casa Pequeña, fingiendo interesarse por Pedrito. Victoria busca un acercamiento con José Luis y, de paso, comprueba que Irene y Alejo tampoco están de acuerdo con la boda de José Luis y Mercedes. Rafael va a disculparse con Adriana por no haber evitado que la encarcelaran. José Luis pide a Bernardo que se disculpe con Adriana, Bernardo acepta a regañadientes. Julio cena con Adriana y allí le declara su amor y la besa. Alejo habla con su padre y le cuenta su historia de amor con Mercedes.

Tras la confesión de Alejo, Mercedes convence a José Luis de que el joven le ha mentido para evitar su boda y niega haber mantenido una relación con él. Mercedes finge ante su sobrino, diciéndole que nunca ha pasado nada entre ellos y dudando de su estado mental. Bernardo se disculpa ante Adriana por orden de José Luis. Antes de abandonar la Casa Pequeña, Victoria intenta manipularlo para que no deje de luchar por Mercedes. Bárbara se disculpa con Rafael por haberlo echado de su casa y tiene un incómodo reencuentro con Alejo. Por otro lado, la joven se sincera con Adriana. Reconoce no ser feliz en Valle Salvaje y piensa que a Pedrito podría estar pasándole lo mismo. Atanasio amenaza a Luisa para que olvide sus sospechas y la criada decide mentir a Adriana acerca del galeno. Julio sigue acercándose a Adriana y le regala un valioso collar que perteneció a Pilara, sin saber que era un regalo de Rafael. Cuando Rafael lo descubre en el cuello de Adriana, monta en cólera.

Bárbara confiesa a Adriana que abandonará Valle Salvaje tras su boda. Bernardo intenta convencer a Mercedes de no desposar con el duque. José Luis presiona a Julio para fijar la fecha de boda. Rafael confiesa a Adriana que el collar que le dio Julio es un regalo que le hizo el propio Rafael a Pilara. Mercedes no consigue acercar posturas con Irene, quien hace buenas migas con Bárbara. Gaspar alerta a Rafael de malas noticias, ha encontrado nuevas reses muertas. Gaspar tranquiliza a Irene, que sigue asustada por su encuentro con Matilde. El duque sigue sin creer a Alejo, a quien Mercedes hace luz de gas, fingiendo que se ha inventado su relación. Alejo tiene un encontronazo con Luisa, con quien se disculpa después. José Luis se encara a Victoria. Julio repara en que Adriana no lleva el collar, ella se excusa en que tiene demasiado valor para el uso diario. Gaspar trata de reprender a Matilde, pero ella le planta cara. Atanasio vuelve a amenazar a una aterrada Luisa.

Mercedes pide a José Luis que interceda para que sus hijos apoyen su boda. Julio invita a cenar a su prometida, quien expresa su miedo a perder a Bárbara en cuanto pase su boda. Julio está de acuerdo en posponer la fecha del enlace. Matilde amenaza a Gaspar para que acabe su relación con Irene. La joven busca consuelo en su amante y Gaspar le miente para tranquilizarla. Bárbara e Irene siguen estrechando lazos y haciéndose confidencias. Isabel y Victoria tantean a Bárbara para saber qué opina sobre la posibilidad de despedir a Luisa. Bárbara se opone, buscando ayuda en Adriana, quien se enfrenta al aya, que se siente ofendida y marcha, enfadada. Alejo va a la Casa Pequeña para seguir conociendo a Luisa, que le tiene fascinado. Bernardo muestra sus cartas a Mercedes, no va a permitir que se case con José Luis y tiene un arma poderosa: la carta que Mercedes le dejó a Pilara confesándole su romance con Alejo.

Bernardo no cede a las súplicas de Mercedes y saca a la luz la carta que la compromete. Matilde se desahoga con Isabel: teme que Gaspar sea infiel. Isabel trasmite a Victoria las sospechas de Matilde. Adriana se enfrente a su tía por Luisa. Mercedes trata de imponerse a Alejo e Irene, que desprecian su autoridad. Bárbara comparte con Irene sus planes de abandonar Valle Salvaje. Alejo convence a Luisa para que le dé clases de cocina y Bárbara previene a la sirvienta sobre el joven. Rafael lleva el collar de su madre y se sincera con Adriana. Rafael termina de venirse abajo cuando Julio le confiesa que se está enamorando de su prometida. Tras encarar a Gaspar e Irene, sin conseguir nada, Matilde recurre a Mercedes, segura de que tienen un idilio. Rafael convence a Adriana de acabar la relación. Ella le pide ponerle fin del modo más romántico. Mercedes encuentra la manera de manipular a Bernardo, seduciéndolo.

Mercedes consigue que Bernardo destruya la carta. Luisa percibe que Adriana oculta algo cuando le habla de su viaje a la villa. Julio pide a Victoria que anime a Adriana a poner la fecha de la boda y esta aprovecha para amenazar al duque. Alejo tiene un encuentro con Luisa, quien le confiesa que ella no tiene dónde ir a visitar a sus padres fallecidos. Irene se refugia en brazos de Gaspar, a quien teme perder. Mercedes trata de congraciarse con Alejo e Irene, a la que acaba levantando la mano. Victoria intercede para que Bárbara haga las paces con Isabel y amenaza a Adriana para que no retrasare la boda, mientras esta prepara su escapada con Rafael. Mercedes pone a prueba a Gaspar y confirma sus sospechas. Alejo tiene un conmovedor gesto con Luisa y Bárbara se inquieta al saber que el joven ha estado en su casa preguntando por la criada. Mercedes empieza a ejercer de señora de la casa, pero José Luis la pone en su sitio. La culpabilidad hace que Rafael se rompa.

Luisa presencia el sufrimiento de Adriana tras el plantón de Rafael y Julio acusa la tristeza de su prometida. Mercedes se desahoga con Bernardo y confirma que Victoria se ha convertido en un problema. Bárbara comparte con Adriana su inquietud por Isabel y queda con Irene, que, en un momento a solas con Gaspar, se alarma al saber que Mercedes fue a verle. Alejo ha encargado la lápida para los padres de Luisa. Adriana echa en cara a Rafael su cobardía, mientras Julio comparte con José Luis su preocupación por Adriana. Mercedes toma la iniciativa e invita a Adriana a una comida familiar, excluyendo a Victoria. Bárbara despierta las alarmas de Isabel, que previene a Victoria. Esta decide cambiar de estrategia con Luisa, mientras la sirvienta satisface el deseo de Alejo, organizando una merienda en campo. Irene tantea a Mercedes, sin resultado, y esta previene a José Luis sobre Victoria mientras Adriana vuelve a refugiarse en los brazos de Rafael.

Julio reúne a sus hermanos para pedirles su apoyo durante la comida familiar. Isabel descoloca a Luisa con su actitud y Bárbara la interroga sobre su relación con esta. Victoria trata de imponer su presencia en la comida de la Casa Grande, pero Mercedes lo impide. Los temores de Adriana se cumplen y, durante la comida, Julio se declara y le pide matrimonio en presencia de todos. Gaspar continúa engatusando a Matilde hasta que esta lo sorprende en el pajar con Irene. Luisa marca distancias con Alejo, quien finge estar de acuerdo. Victoria interroga a Adriana y se crispa al confirmar que Mercedes sigue ganando terreno con José Luis, ante quien se planta, exigiéndole su dinero. Bárbara trata de animar a Adriana antes de tener un encuentro con Atanasio en el que despierta el interés del galeno. Matilde amenaza a Gaspar e Isabel es testigo. Julio se preocupa por Rafael y acaba descubriendo, con estupor, que su hermano lleva el colgante que le regaló a Adriana.

Julio pregunta a Adriana por el colgante y ella le miente. Alejo se lastima mientras ayuda a Luisa en la cocina provocando un acercamiento cuando esta se lo cura. Mercedes muestra su apoyo a Adriana e intenta que ambas organicen la boda, lo que le lleva a Victoria a discutir con Adriana. Esta le cuenta a Rafael que Julio le ha pedido que lleve el collar en la boda. Victoria consuela a Matilde ante las dudas respecto a Irene y Gaspar. Atanasio intenta sonsacar información a Bárbara sobre Adriana y su familia. Isabel continúa con su estrategia de mostrarle su cara más amable a Luisa. Alejo tiene otro desencuentro con Mercedes, al igual que Irene: su tía podría contar sus secretos. Victoria sufre un ataque de ansiedad a causa de todo lo que tiene encima. Gaspar le vuelve la espalda a una afectada Irene delante de Matilde. Victoria se enfrenta a Mercedes al sentirse ninguneada y se anota un tanto. Julio enfrenta a Rafael y le pregunta por qué robó el colgante.

Rafael le reconoce a Julio que robó el collar de Adriana y José Luis le obliga a devolverlo. Isabel sigue intentando ganarse a Luisa, pero ésta no se fía y se lo hace saber a Adriana. Mercedes insiste en que un galeno trate el corte de Alejo, pero su sobrino no responde de las mejores maneras. Atanasio se remueve por dentro cuando ve el cuadro de Antonio en el salón. Isabel alerta a Victoria: Mercedes sabe del idilio entre Gaspar e Irene por Matilde. Gaspar se disculpa ante Julio por algo más que el trabajo y, cuando coincide con Irene, ella le gira la cara, rechazándolo. Tras un enfrentamiento con Mercedes, Victoria le pide que no vuelva por su casa. Más tarde le confiesa su amor a José Luis. Julio se disculpa con Rafael, pero le pide que devuelva el collar a su prometida. Luisa se preocupa ante la cercanía de Atanasio y Bárbara. Rafael y Adriana intentan separarse el uno del otro, pero no son capaces. Atanasio confiesa la verdad a Luisa.

Atanasio le dice a Luisa que el hombre que mató Adriana era el padre de José Luis. Isabel habla con Adriana para hacerle ver que, tal vez, esté siendo injusta con Victoria al no darle protagonismo en la organización de la boda, cosa que sí hace con Mercedes. Pedrito escucha cómo Bárbara le cuenta a Isabel que abandonará Valle Salvaje. Atanasio le confiesa a Alejo que conoció a su abuelo, pero miente en su relato. Mercedes tiene a sus sobrinos bajo control, pero está preocupada por Alejo. Pedrito se enfrenta a sus hermanas por haberle ocultado que Bárbara los abandonará después de la boda. Matilde, animada por Victoria, prepara la trampa para Irene y Gaspar. Adriana quiere devolverle el collar a Rafael y así se lo hace saber a Julio, que terminará devolviendo el collar a su hermano. Victoria asegura a José Luis que la boda no se celebrará mientras ella no tenga su dinero o su amor. Bárbara cambia de opinión y le cuenta a Pedrito que se queda. Gaspar rechaza a Irene en el pajar.

La decisión del duque de anular la boda se cobra sus primeras víctimas: Mercedes, Bernardo y una furiosa Victoria que no dejarán las cosas como están.

Adriana se siente culpable con Rafael por hacerle propietario de sus posesiones sin que el muchacho lo sepa. ¿Acabará confesando?

Gaspar vive uno de los momentos más amargos en la finca y en su matrimonio. Mientras, José Luis recibe el listado de las propiedades de Evaristo.

Leonardo aguarda la respuesta de la Salcedo. ¿Le dirá que sí? Julio decide enfrentar su realidad y hablar con Adriana, mientras Luisa se ve obligada a tomar una decisión.

Rafael y Adriana toman una drástica decisión tras conversar con Julio. Mercedes comprueba que Bernardo le oculta algo. Gaspar pone en peligro la vida de un habitante del valle.

Varios habitantes del valle reciben informaciones que afectan sus vidas. La vida de Alejo pende de un hilo, pues Gaspar no está dispuesto a soltarlo.

A pocos días del evento del año en Valle Salvaje, una invitada trae de cabeza a Mercedes. Atanasio le pide un favor a Julio. El duque le hace una propuesta a Rafael.

Alejo tiene una idea para formar una familia con Luisa y Evaristo. Adriana no quiere separarse de Rafael, y el duque le anuncia a Mercedes un plan que la desconcierta.

Rafael anuncia su inminente partida, provocando todo tipo de reacciones en su familia. Victoria y el duque hablan de un tema delicado, sin sospechar que alguien los escucha.

Gaspar vuelve a sentirse desplazado, mientras Leonardo pide ayuda a Irene para sorprender a Bárbara. Alguien de la Casa Grande decide no asistir al baile de máscaras.

Mientras Isabel arriesga su vida por proteger a Pedrito, el baile de máscaras comienza. La llegada de una desconocida y una inesperada propuesta sorprenden a los invitados.

Victoria tiene un momento de gloria. Matilde llega a la Casa Grande buscando ayuda. Isabel parece fuera de peligro, pero Gaspar no lo está. La llegada de María afecta a Leonardo.

Una nueva criada, a quien todos en el valle conocen, llega a la Casa Pequeña. María continúa en su búsqueda y descubre que Mercedes puede ayudarla. Gaspar empeora.