Destaca cómo construir una "autopista para erizos" en nuestros jardines. No solo ofrece una actividad placentera para los humanos, sino que también sirve como un recurso vital para los erizos. Estos pequeños pasajes les permiten acceder a diversos hábitats que les ofrecen alimento, agua y refugio esenciales, lo que contribuye a su supervivencia y conservación.

En este episodio, la historia se desarrolla bajo un antiguo roble donde una familia de erizos encuentra refugio. Al anochecer, una madre erizo lleva a sus tres crías a su primera aventura de búsqueda de alimento.

En este episodio, al caer la noche, una madre erizo lleva a sus crías de vuelta a su nido, solo para descubrir que el más pequeño ha desaparecido. Angustiada, busca frenéticamente a su cría, intentando seguir su rastro y consciente de que el tiempo se agota.

En este episodio, el erizo más pequeño se siente atraído por el irresistible olor a comida para gatos. Ajeno a los posibles peligros, está decidido a devorar hasta el último bocado.

Al amanecer, la tensión aumenta para el erizo más pequeño, quien siente la presión de no estar a salvo en casa y dormido. Mientras los rayos del sol atraviesan la hierba alta, se cansa y se acurruca para descansar, pero es un descanso breve.