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Indiana Jones y el dial del destino (2023)

6.5 | jun. 25, 2023 (US) | Aventura, Acción | 02:35
Presupuesto: 294 700 000 | Ingresos: 383 963 057

Una leyenda se enfrentará a su destino.

El arqueólogo Indiana Jones deberá emprender otra aventura contra el tiempo para intentar recuperar un dial legendario que puede cambiar el curso de la historia. Acompañado por su ahijada, Jones pronto se encuentra enfrentándose a Jürgen Voller, un ex nazi que trabaja para la NASA.

Equipo destacado

Writer, Director
Writer
Executive Producer
Characters, Executive Producer
Original Music Composer, Orchestrator, Conductor
Producer
Supervising Sound Editor, Additional Sound Re-Recording Mixer
Producer

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Reseñas

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Roberto Román Ortiz
5 | nov. 26, 2024
La peli es un remix de lo mejor de la trilogía; nazis torpes + niño que ayuda + pasadizos subterráneos + mujer que ayuda a Indy + pelea en un bar + alguna persecución de tráfico loca. Pero el guión es muy flojo. Hay momentos que parece "Agárralo como puedas". En muchos momentos Indiana Jones es un personaje secundario que está ahí por estar. Por cierto, ¿está entrega era necesaria? Es decir, ¿aporta algo a la saga? Mejora a la cuarta pero lejos de la trilogía.
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Nochvemo
4 | sep. 11, 2023
**Esto es un asco** Si algo nos confirma la secuela que nos ocupa hoy es que, lamentablemente, el cine comercial ha dejado de existir como expresión cultural, literaria o creativa. No hace tanto tiempo de aquella trilogía magistral en la que Lawrence Kasdan, Philip Kaufman o el propio George Lucas ideaban e hilvanaban relatos absorbentes al servicio de personajes rebosantes de personalidad, de rasgos inconfundibles, para que alguien como Steven Spielberg los interpretara a su manera y los plasmara con carácter y con genio. Todo esto se ha perdido. Incluso en una franquicia como esta (ahora en manos de la infame Disney), Indiana Jones se ha apartado de aquella idea cinematográfica, y hoy en día se favorece por encima de todo el hiper realismo gráfico, el de los efectos especiales, el de los gags manidos y absurdos con protagonistas aburridos, planos y sin carácter. Han dejado de importar los sucesos, las anécdotas, la identidad, el temperamento. Solo importa que lo que aparezca en pantalla sea lo más parecido a la realidad, que los ordenadores trabajen para los directores mientras éstos soslayan cualquier romanticismo con el cine de siempre. En realidad ya no importa qué es lo que se cuenta en una película comercial del siglo XXI, lo conveniente es que las explosiones y los accidentes sean lo más figurativos posible, sin dejar espacio a la imaginación, a la conjetura o a la fantasía. Definitivamente, esto es un asco.